lunes, 28 de marzo de 2016

Integrar la enseñanza de la bondad en el colegio

Los gestos de bondad tienen un gran número de beneficios físicos y emocionales. Cada vez
es más evidente el hecho de que los niños necesitan una dosis de dicho tipo de experiencias para crecer como individuos sanos, felices y bien integrados.

Patty O’Grady, es una experta en el área de las neurociencias, el aprendizaje emocional y la psicología positiva, que presta especial atención al contexto educativo. Ella cree que “la bondad cambia el cerebro al ser experimentada. Los niños y adolescentes no aprenden acerca de la bondad únicamente pensando sobre ello y hablando acerca de ello. La bondad se integra y se aprende al sentirla, de manera que posteriormente pueda reproducirse. La bondad es una emoción que los estudiantes sienten y la empatía es una fortaleza que ellos comparten”.